Bueno, pues al final no me compré el bolso de leopardo de APC, hice algo mucho peor: me compré unas bermudas de leopardo.
No sé si me las pondré. No sé si me las pondré como en la foto, con tacones a juego (de Lanvin, los compré hace quince años, están como nuevos) para salir de noche (es improbable), o si las llevaré por Cadaqués y para pasear a la perrita, con las Birkenstock Madrid que llevo durante todo el verano (y que me tienen que arrancar de los pies cuando empieza el otoño) y con camisas de hombre (que en realidad no son camisas de hombre, claro, a casi ninguna mujer le quedan bien las camisas de hombre: son camisas de mujer que parecen camisas de hombre. Es muy complicado el mundo de la moda).